Seguridad para el trabajo

Los Equipos de Protección Individual (EPI) son fundamentales en el mundo laboral, ya que actúan como una barrera de protección entre el trabajador y los posibles riesgos presentes en su entorno de trabajo o en las reparaciones caseras.

La mayoría de los accidentes que suceden en el trabajo y en el hogar se pueden evitar. No solo tenemos cuidado cuando realizamos una tarea, además, debemos estar bien equipados para protegernos lo máximo posible.

¿Cuándo es obligatorio el uso de un EPI?

Se considera que un EPI es obligatorio cuando:

El riesgo no puede ser evitado: A pesar de implementar medidas de seguridad colectivas, aún existe un riesgo residual para el trabajador.

La protección colectiva no es suficiente: En algunos casos, los sistemas de protección colectiva no son suficientes para garantizar la seguridad del trabajador.

Ejemplos de EPI:

Cabezales: Cascos de seguridad, viseras, protectores auditivos.

Ojos y cara: Gafas de seguridad, pantallas faciales, protectores solares.

Vías respiratorias: Máscaras, filtros.

Cuerpo: Chalecos, monos, trajes protectores.

Manos y brazos: Guantes, mangas.

Pies y piernas: Zapatos de seguridad, polainas.

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