No me concentro, ¿qué hago?
Si eres estudiante y no te concentras cuando estás estudiando o si estás trabajando y te distraes con facilidad, quizás el problema sea el espacio o lugar donde está realizando la tarea.
Una silla incómoda, una mesa en mala posición o la iluminación influye mucho en nuestra capacidad de concentración. Si no solucionamos estos pequeños inconvenientes, quizás cuando queramos darnos cuenta ya sea demasiado tarde.
Son muchos los jóvenes y niños estudiantes que sacan malas notas porque su concentración en los estudios es baja. Cada persona es distinta, pero de lo que sí estamos seguros, es que el ambiente donde se realiza el estudio influye en el rendimiento. Descubre 10 consejos para mejorar el espacio de trabajo.
Consejos:
- Evita estudiar o trabajar a horas en las que estás más cansado.
Procura relajarte y empezar con una actitud positiva, esto te ayudará a que la tarea que vas a comenzar no se te haga cuesta arriba. Si empiezas una actividad pensando que va a ser muy dura o pesada, al final se hará así. Intenta ir poco a poco y estar despejado. No te agobies sin necesidad.
2. Vigila el ambiente en el que estás rodeado.
Si vas a realizar la actividad en un sitio concurrido de personas es más fácil distraerse con cualquier conversación. Y si hay música o la televisión está encendida, vete a otro lugar, una habitación o un lugar en el que los ruidos no hagan que pierdas la concentración y haya silencio.
3. Apaga los dispositivos electrónicos que puedan distraerte.
Pon el móvil en modo “silencio”, sin el vibrador, prueba a activar el “modo avión” para evitar distracciones innecesarias de mensajes y llamadas. Otra buena opción es no ponerlo cerca del lugar de trabajo para evitar la tentación de usarlo o mirarlo.
4. Utiliza un mobiliario adecuado.
No vale trabajar en cualquier sitio. Si vas a estudiar o estás trabajando con un ordenador, tu zona de trabajo es muy importante. La mesa y la silla que utilices dependerá del tiempo que aguantes con la tarea que realizas. Una buena mesa, con espacio para el trabajo y accesible a las cosas que vamos a utilizar, y una silla cómoda, pero no demasiado para no dormirnos, en la que la espalda esté recta y las piernas no se cansen, van a contribuir en que podamos estar el tiempo de trabajo concentrados en lo que estamos haciendo.
Recuerda levantarte unos segundos cada hora para que la sangre vuelva a la cabeza. No por estar todo el tiempo mirando un ordenador o un libro va a entrar en nuestra cabeza, oxigénate.
Descubre nuestras recomendaciones al final de este artículo.
5. Buena iluminación.
La luz natural es importante, pero si estudias en un lugar en el que no es posible acceder a ella, ya sea por el lugar o por la hora, utiliza una lámpara con buena luz. Una buena iluminación es primordial para el lugar donde vas a realizar la actividad.
6. Trabaja con las materiales adecuados y en buen estado.
Nos extrañaría ver a un carpintero intentando cortar un trozo de madera con unas tijeras, ¿verdad?
Pues, para estudiar y trabajar en un trabajo de oficina no podemos usar un ordenador o Tablet que no tenga recepción con buena conexión a internet para realizar búsquedas eficaces, ni tampoco bolígrafos que no tienen tinta para escribir, ni tampoco teclados de ordenador a los que le faltan teclas.
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7. Mantente bien hidratado y con el estómago lleno.
Sobre todo, en las épocas con más calor, es importante mantener el cuerpo bien hidratado. Una buena opción es tener una botella de agua o de bebida energética encima de la mesa de trabajo o cerca de ella, y recordar rellenarla cuando se termine.
No estudies o empieces una tarea del trabajo con el estómago vacío, pero tampoco te atiborres de comida, se equilibrado. Come bien y sano antes de empezar cualquier actividad, y si necesitas comer a menudo, ten cerca algún alimento ligero o una pieza de fruta para que no te baje el azúcar.
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8. Dentro de lo que sea posible, que hay una buena temperatura en el lugar de trabajo.
Si la habitación u oficina en la que estemos intentando concentrarnos tiene una alta temperatura y hace mucha calor, la concentración será más baja, nos entrará sueño y no estaremos a gusto. También, si el lugar de trabajo se encuentra a una temperatura baja, estaremos más concentrados en buscar una manta o en que nuestras manos ya no responden a nuestro cerebro para escribir porque se han “congelado”.
Procura que la temperatura sea la que más se adapte a tu temperatura corporal, así estarás más concentrado en lo que estás haciendo.
9. Recuerda prepararte bien antes de empezar y ten paciencia.
Si lo tienes todo preparado, libros, apuntes, bolígrafos, ordenador, bebida, etc., no tendrás que estar levantándote innecesariamente a buscar las cosas que necesitas durante el estudio. Esto también te dará tranquilidad para empezar la actividad y no estar pensando en las cosas que vas a necesitar a continuación.
Ten paciencia si no sale todo a la primera, un buen hábito de estudio diario hará que tu cuerpo se acostumbre a estudiar y a retener mejor la información. También es importante para el trabajo, y aún más si trabajamos en casa.
10. Intenta tener un horario fijo.
Prueba a hacerte un buen horario y cúmplelo siempre que sea posible. Estudiar a las mismas horas cada día, hará que el estudio sea más llevadero y tu cuerpo esté adaptado a un horario regular. Si eres constante, tu mente te pedirá estudiar al cabo de un tiempo.
Cuando eres ordenado y te ciñes al horario que has ideado, verás que tu rendimiento es mayor y quizás descubras que te queda tiempo libre para realizar otras actividades.
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